Estaba leyendo una revista 
mientras pensaba en una canción de rock&roll 
Corría el año 1954 
y yo no llevaba mucho tiempo tocando, 
cuando salió un tipo por la radio 
y dijo: 
“Lamento tener que comunicárselo a sus fans 
pero Johnny Ace ha muerto”. 

Bueno, yo no era precisamente 
un fan de Johnny Ace, 
pero me sentí igual de mal, 
por éso encargué una foto suya 
y estuve esperando con ansiedad que llegara. 
Vino directamente desde Texas, 
mostraba un rostro triste y sencillo 
y le habían puesto una dedicatoria al final 
que decía “De parte del difunto Gran Johnny Ace”. 

Fue en el año de los Beatles. 
Fue en el año de los Stones. 
Fue en 1964. 
Entonces yo vivía en Londres con la chica del verano anterior. 

Fue en el año de los Beatles. 
Fue en el año de los Stones. 
Un año despues de lo de Kennedy. 
Pasábamos las noches en vela 
y desperdiciábamos los días. 

Y la música fluía 
con una facilidad pasmosa 
señalando mi destino. 

En una fría noche de diciembre 
caminaba en medio de la marea de las Navidades 
cuando un extraño se acercó y me preguntó 
si me había enterado de que John Lennon había muerto. 
Nos fuimos los dos a un bar 
y nos quedamos hasta que cerraron. 
Y cada canción que tocamos 
fue en honor del difunto Gran Johnny Ace.